En parejas, una persona dibuja con el dedo sobre la espalda de su compañero una imagen o figura (un objeto, animal, acción, etc.). El receptor debe interpretar lo que ha sentido y representarlo corporalmente, sin palabras.
Después de que el receptor haga su representación, la persona que dibujó se une a él para crear juntos una breve escena improvisada, partiendo de lo que el compañero entendió. Esto permite comprobar si el dibujo fue acertadamente interpretado o generó una situación nueva inesperada.
Después de que el receptor haga su representación, la persona que dibujó se une a él para crear juntos una breve escena improvisada, partiendo de lo que el compañero entendió. Esto permite comprobar si el dibujo fue acertadamente interpretado o generó una situación nueva inesperada.